TRASTORNOS ADAPTATIVOS
Estrés, tenemos que hablar. Lo nuestro no puede seguir así. Yo ya no puedo más.
Diferentes estudios han demostrado que las enfermedades de mayor impacto en la vida del ser humano, incluyendo las patologías mentales, están relacionadas con el estrés ambiental y las situaciones adversas a las que se tiene que enfrentar un individuo.
Los sucesos vitales, son cambios importantes que requieren ajustes drásticos durante un corto período de tiempo, como por ejemplo: el matrimonio, la muerte de un amigo, los problemas en la relación de pareja, el divorcio, la compra de casa, el despido laboral, el cambio de residencia, el nacimiento de un hijo, las vacaciones, la enfermedad de un familiar, etc. Estos acontecimientos importantes para la vida de las personas se conocen también como estresores psicosociales.
Aunque cualquiera de estas vivencias pueden resultar angustiosas y estresantes para cualquier persona, algunas presentan dificultades a la hora de manejarlas o de adaptarse a ellas, lo que suele suponer la aparición de este tipo de trastorno psicológico.
El trastorno adaptativo por tanto, aparece como forma de reacción a un factor vital estresante a lo largo de los tres meses siguientes a su aparición. La persona experimenta una serie de dificultades emocionales y del comportamiento al intentar afrontarlo, lo que provoca malestar intenso, acaba deteriorando las relaciones sociales, disminuye el rendimiento laboral o el nivel previo de actividad.
Puede ser que la persona mantenga un estado de ánimo deprimido la mayoría del tiempo; en otras ocasiones es la sintomatología ansiosa la más predominante. En otras, se presenta sintomatología ansiosa y depresiva conjuntamente.
Cuando el estresor o sus consecuencias han terminado, los síntomas no se mantienen durante más de otros seis meses.
La aparición de un estresor psicosocial también puede complicar el curso de una enfermedad médica diagnosticada. Así mismo, el estrés y la aparición del primer episodio depresivo están directamente relacionados.