Trastorno de apego reactivo
La familia es la piedra angular sobre la que se asientan las múltiples experiencias que van conformando las bases de la conducta futura de los menores.
Este trastorno, suele ocasionarse durante los primeros años de vida del niñ@, al menos después de haber alcanzado los 9 meses de edad. Suele acontecer debido a que el/la menor recibe un trato inadecuado y descuidado por parte de sus padres o de los cuidadores principales. En muchas ocasiones se acompaña de negligencias, abusos o abandono. Esto provoca que el niñ@ no reciba suficiente afecto ni se vean suplidas sus necesidades emocionales y de cuidado básicas, de forma que exista una falta de seguridad, afecto, amor, bienestar y protección.
SÍNTOMAS
1/ Síntomas Emocionales
- Rechazo
- Irritabilidad
- Distancia emocional con respecto a los padres o cuidadores
- Tristeza
- Afecto positivo limitado
- Miedo incluso en situaciones que no suponen amenaza
- Desconfianza
- Labilidad emocional
2/ Síntomas Conductuales
- Retraimiento
- Escaso contacto o evitación con padres o cuidadores
- Escasa o mínima relación social
- Rechazo al contacto físico
- Aislamiento
- Incompetencia social
3/ Patrones sociales y de cuidado
- Negligencia parental
- Abuso
- Abandono
- No cubiertas las necesidades emocionales, de cuidado, de alimentación y de bienestar
- Cambio constante de cuidadores primarios
- Educación en contextos inadecuados
TRATAMIENTO
En estos casos, es adecuado un abordaje terapéutico centrado en el establecimiento de una vinculación afectiva con el cuidador o cuidadores de referencia, donde se aborden pautas educativas y de terapia familiar, con el fin de restablecer una adecuada relación de apego.
A su vez, es importante el trabajo de terapia cognitivo-conductual enfocado en el fortalecimiento de la autoestima del niñ@, del desahogo emocional y el entrenamiento en habilidades sociales, que le permitan un adecuada relación personal, social y familiar, así como, el manejo emocional.
